martes, octubre 03, 2006

Fajando en el cine...

Como ya se va haciendo costumbre, si usted es un jovenzuelo(a) con chispazos de pubertad en su rostro, lo más probable es que nunca le haya tocado disfrutar un escarceo erótico (vulgo “fajezote”) en una vieja sala de cine. Pero como un servidor se acerca a los 40 años, y ahora recuerdo más de lo que hago, no me queda más que ver con nostalgia aquellas épocas adolescentes en las que, con mi pareja de turno, buscaba el cobijo de la oscuridad cinera para dar rienda suelta a la calentura y las exploraciones buco-manuales. En aquellos tiempos la elasticidad era condición sine qua non de los amantes furtivos, de tal manera que se pudiera alcanzar (con discreción, tampoco hay que dar espectáculo sin cobrar) el húmedo tesoro que susurrante nos anhelaba.

¿A poco nunca se han echado un fajecín en el cine?, ¿si?, ¿verdad que es rico?.

Grandes recuerdos tengo de los cines con balcón (el Charles Chaplin de plano cerró su segunda planta al ser ya casi descardo su uso como hotel de paso), o del Cine Foro en sus primeros tiempos. Al ser una sala por demás solitaria y cavernosa, era el lugar ideal para el intercambio de sudores, pasiones y arrumacos.

Recuerdo que en algunos cines como el Orfeón (en pleno barrio de San Juan de Dios y cerca, muy cerca de Obregón, calle famosa por sus mujeres de falda corta y lonja desbordante), el desfogue amoroso era tan común que nunca faltaba el tipejo armado de linterna que acechaba con su temible haz de luz a los amantes que se descubrían mutuamente en la estrechez de sus asientos.

Fajar en el cine significaba mucho más que manchar el pantalón, era el tiempo y el espacio en el que los amantes (condición no estrictamente necesaria) podían vibrar ante el efímero contacto de la piel y la humedad que, de otra forma, estaría vedada.

Consejo: Si desean explorar los múltiples placeres que proporciona el faje cinero, no vayan a ser tan ingenuos como para es-coger (je, je) una función de los X-Men en miércoles por la tarde. Elijan las películas que van de salida o cualquiera de esas del Tour de CineFrancés y que básicamente nadie pela.

Luego me platican como les fue.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

"fajando en el cine" es una clara muestra del grado de avance de tu enfermedad mental, ya estas en las últimas. Creí que tu blog era para hablar profesionalmente de cine y no para que externaras publicamente tus perversiones.

Anónimo dijo...

MTa chido el relato. Me parece muy bien la descripcipón de las "mujeres de faldas cortas" y grandes lonjas. Lástima que ya no tengas esa edad. Por mi parte, trataré de disfrutar lo que viene.
En cuanto al asustadizo y aburrido anónimo que te acusa de enfermo mental, creo que ni siquiera sabe el imbécil lo que eso significa.

Lupinzon

Anónimo dijo...

Mi estimado amigo (ANONIMO), si cuando menos tuvieras la delicadeza de ponerte a leer no solo este post, para darte cuenta que no solo este es el tema de este BLOG, sino que existen ya un buen número de descriciones de peliculas, que basta por demás decirlo, no creo que ni siquiera conozcas ni los titulos ni los directores... te podrías dar cuenta de que dentro de todos y cada uno de nosotros ( para aquellos que conocimos esos cines), esos sucesos fueron parte formadora de nuestra lujuriosa vida cotidiana... Por último, si lo que quieres es ver "EXCELENTE CINE" te recomiendo la cartelera cotiana del cine gringo para que puedas criticar esos filmes. SALUDOS. P.D. NO TE CAERIA MAL DARTE UNA VUELTA POR EL CINE GRETA GARBO, LA SALA PARIS O LA LINTERNA, CONOCIDOS POR LA SENSUALIDAD, CACHONDERIA, LUBRICIDAD Y PROFUSION DE PELOS Y ERECCIONES QUE PROBABLEMENTE TE DEN IDEAS PARA UNA CHAQUETITA SOLITARIA. ATTE. S.S. JUAN SANDOVAL.

Anónimo dijo...

El Anónimo nunca fajó en el cine porque nunca lo pelaron. La verdad el que no lo hizo no vivió una experiencia que después se arrepentirá y no tendrá esa sensación de recordar algo con una risa.

Anónimo dijo...


Quizá yo no lo viví, pero eso a usted que chingados le importa, pinche anónimo putito?

¿Tiene usted el valor para decir quién es usted o lo deshuevaron?

Relájese, como fibra y piense en lo que dijo Boris Vian: "Todo esto es verdad porque lo he inventado todo".

Att. El Cinéfilo Sarnoso.