lunes, octubre 09, 2006

Santo en el mundo de los muertos: recuperando la infancia


Dirección: Gilberto Martínez Solares

Guión: Rafael García Travesí, Jesús Sotomayor Martínez

Música: Gustavo César Carrión.

Intérpretes: Santo, Blue Demon, Pilar Pellicer, Carlos León, Antonio Raxel, Guillermo Bianchi.

Origen: México, 1969.

Las películas del Santo resultan un fenómeno difícil de analizar ya que los puntos de vista con respecto a ellas van, desde el escepticismo a ultranza, al júbilo desbordado.

Un servidor no se inclina ni hacia un punto ni hacia al otro ya que, a pesar de haber crecido viendo con emoción estas películas en las funciones sabatinas del Canal 2 de Televisa, el implacable paso del tiempo me hizo darme cuenta de la enorme pobreza de estas producciones, su incoherencia y su absoluta falta de lógica. Pero a pesar de ello, nunca dejarán de ser parte de mi bagaje personal y, como adicto que soy a los placeres culposos, siempre que me sea posible revisitaré algunas de estas cintas especialmente ahora que han sido rescatadas en formato DVD.

La cinta que hoy me ocupa fue de las que me “apanicó” cuando tenía a lo mucho 8 años, y es que en aquel entonces los niños no teníamos ni internet, cable, celulares o cosas así por el estilo. Vivíamos todavía en un mundo en cual el proceso de convertirse en adolescente y adulto era especialmente peliagudo. Un mundo en el cual las ilusiones no se encontraban permeadas por el afán de posesión y en el que todavía era posible tener espacios para la fantasía y la imaginación. Un mundo en el cual el animismo era cosa de todos los días y, las leyendas y tradiciones eran cosa cierta que no debería ser juzgada.

Y en ese contexto veo, solo con mi abandono, esta película. Me espantó tanto que no podía dormir pensando en que en cualquier momento se me iba a aparecer la tía quedada de la llorona o el mismísimo chamuco.

Pero no pasó nada. Y crecí para convertirme en un criticón de cine sarcástico e innoble. Pero buscando en mis resquicios del pasado recupero al niño que alguna vez se emocionó ante el desfile enloquecido de “mostros”, brujas, anuales, vampiros, hombres-lobo, engendros del mal y demás tipos de dudosa reputación, que fueron vencidos, invariablemente por El Santo.

En esta cinta, El Santo Trabaja como una especia de Judicial en la época virreinal y se dedica a cazar entes que tengan pacto con el maligno. Después de tatemar algunos en la hoguera (y donde una hechicera lanza una maldición a cumplirse en 300 años), damos un salto temporal mayúsculo a plena época contemporánea donde, la bruja malvada con cara de Pilar Pellicer, llevará a cabo su venganza (no se apuren, El Santo le parte su madre a todos los espectros).

No voy a mencionar todos los defectos de esta cinta que son los mismos de todo el cine de luchadores.

Quizá si llegas a rentar o comprar esta cinta puedas burlarte de lo ingenuos que éramos hace 30 años, pero piensa en esto: ese mundo, mi mundo era mágico y con esperanza. ¿Cómo es el tuyo?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Vaya que son geniales las películas de luchadores de hace 30 años, y a pesar de que mi infancia osciló más entre el mundo magico de Walt DIsney y las caricaturas de ojos grandes, vale la pena ver estas joyas del cine nacional, que quizás no tengan los mejores efectos especiales, pero si logran captar tu atención... Ah, una cosa más... ¿Has visto la película del Santo y Blue Demon contra las momias?... siempre me pregunté como es que siempre que el Santo caminaba por las calles de Guanajuato durante las noches y que no se encuentra ninguna persona (ni por equivocación), ah, pero cuando se da el ataque masivo de dichos entes, el pueblo entero s encuentra concentrado ahí (¿cómo saldría todo el montón de momías sin que nadie se percatara?)... ¿Qué alguien me explique?